Es bien conocida la devoción franciscana por la inmaculada concepción de María, en Tartagal esto se vive de una manera intensa y emocionante cada año porque además de la misa y la procesión en torno a la imagen de María, habitualmente e suma la imagen de la Virgen de la Peña, que es trasladada para tal ocasión desde el paraje donde se encuentra su santuario hasta la ciudad, donde visita las parroquias antes de la gran procesión. En aquella oportunidad, nuestros hermanos seglares se sumaron a la organización de la procesión y colaboraron con la liturgia, haciendo el camino procesional con la gran comunidad de Tartagal.